Me llamo Inmaculada, aunque mi familia y mis amigos me llaman Ima.
Mi afición por las miniaturas para casas de muñecas empezó en el año 1995. Hacía tiempo que quería tener una casita, pero mi economía no me lo permitía. Es un hobby que resultaba caro por aquel entonces: apenas existían tiendas donde comprar, y las que habían resultaban demasiado costosas para mi bolsillo.
Pude empezar a hacer realidad mi deseo cuando empezaron a salir los coleccionables. Durante el montaje tuve que superar pequeños inconvenientes como el encaje imperfecto de algunas piezas...... limar por aquí... rebajar por allá.... Por fin la tuve lista......... y no me gustó su distribución: no era lógica. Carecía de pasillos, de distribuidores........Tenía que cambiarla. Pero ¿cómo hacerlo?.
Antes de empezar a arreglar la "casa grande" había restaurado una casita mucho más sencilla y pequeña, con sólo dos estancias, una arriba y la otra abajo, que había pertenecido a alguien de la familia (no recordamos a quien) y que estaba tan maltrecha que no valía la pena conservarla en su estado original. En la parte de arriba le hice una habitación y un baño (carecía de él); en la de abajo el comedor. Coloqué una fotografía en la pared del fondo, donde aparecíamos toda la familia y electrifiqué las tres estancias. Conservé su nombre original: "Villa Jezabel". Cuando estuvo acabada se la regalé a mi madre.
Restaurar esa casita fue relativamente sencillo, pero "la casa grande" era otro cantar. Necesitaba ampliar conocimientos. Eché mano de los libros.... y de internet. Aquí descubrí otro mundo: el de los aficionados a las miniaturas. Me apunté a un foro de aficionados, donde cada uno compartía sus conocimientos y logros sobre el tema. Gracias a éste y a otros foros he conocido artesanos de "medio mundo": españoles (sobretodo catalanes, madrileños, valencianos....), argentinos, chilenos, mejicanos, peruanos, franceses, italianos, ingleses,.......... y con algunos de ellos he establecido verdaderos lazos de amistad, más allá de nuestra común afición.
Se hicieron famosas las "kedadas" de las catalanas. Empezamos a reunirnos en algún café para charlar e intercambiar miniaturas .Hace 5 años hicimos un intercambio navideño, para ello realicé tres modelos diferentes: los dos Cockers durmiendo, una hembra Cocker con tres cachorrillos mamando y otra hembra con tres cachorros a su alrededor. También hice algún que otro payaso, muñecas, ositos… todo les gustó. A partir de ese instante, las casas quedaron relegadas para más adelante, porque todo el tiempo libre que dedico a las miniaturas está "absorbido" por la creación de perros y gatos a escala 1:12 para casas de muñecas.