Mi afición por las miniaturas y las casas de muñecas empezó siendo una niña, cuando nuestros padres nos regalaron, a mi hermana y a mi, una casa alemana escala 1:10, amueblada entera pero, como siempre sucede con los niños ( yo tenía siete años y mi hermana 10) la afición fue decreciendo hasta dejar nuestra casa convertida en una “residencia” para pollitos y más tarde para los gatitos que nos encontrábamos por la calle, situación ésta que nuestra madre no estaba dispuesta a tolerar y la casita desapareció de nuestras vidas.
Con el paso de los años la afición volvió cuando por mi cardiopatía tuve que dejar mi profesión, entonces redescubrí las casas de muñecas y las miniaturas. Mi marido e hijos me regalaron una casa para montar de dos plantas y un ático, entonces se disparó mi imaginación, le agregué una planta baja con escaleras por fuera, un jardín, una terraza…en fin, tardé un año para terminarla. Esta fue mi primera casa y le llamé “La casa grande”, luego vinieron unas cuantas más a esa misma escala, luego otra casita a escala 1:24, escenas en cuadros de colgar, escenas en forma de libros, hasta llegar a las casita 1:48 que son las que hago ahora. Esta afición o hobby ha traído a mi vida, en primer lugar, un montón de amigas con quienes comparto y aprendo, con quienes disfruto de ferias dentro y fuera de España y con las cuales también comparto penas, preocupaciones y muchas, pero muchas alegrías.
Este redescubrimiento de las miniaturas comenzó el año 1999, más adelante conocí a Elizabeth y juntas iniciamos la aventura de hacer la “1ª Exposició de cases de nines i miniatures” en Cubelles para la “Festa major” en Agosto de 2001. Fue todo un éxito que repetimos el 2002, luego nos atrevimos a organizar la exposición junto a una feria de artesanos y así el año 2003 comenzó la andadura de la Fira d’Artesans Miniaturistes”, desde entonces no hemos parado.
Me gusta crear mis propias casas, hacer los planos, cortar la madera, pintar, decorar pero, no le hago ascos a las colecciones, todo es cuestión de personalizar. Con el tiempo me he ido “especializando”, me gusta crear lámparas de cristal y miniaturas diversas con piezas de bisutería, acudo a algunas ferias con ellas. Me encantan las casas a escala 1:48 y reciclar todo lo que puedo.
Las miniaturas han aportado a mi vida una nueva forma de relacionarme, un gran relax en mis ratos de ocio, la considero una terapia genial, te metes en ese pequeño mundo y desaparecen las preocupaciones, las penas, los dolores para volcarte en la creación de un nuevo mundo. Cuando era pequeña la casa de muñecas fue un juguete al que pasada la primera ilusión se olvida en un rincón, ahora es una terapia, un entretenimiento, una necesidad y por que no decirlo…una obsesión.
Este año 2008, con la ayuda inestimable del “grupo”, he conseguido realizar la primera feria y exposición en Barcelona ciudad, también la última a nombre propio, a partir de ahora la responsabilidad es de AssArMi.Cat ( Associació d’Artesans Miniaturistes de Catalunya. Mi deseo es que las miniaturas nos unan, que sepamos aprender de las que más saben, enseñar a las empiezan y sobre todo disfrutar de ellas.
